Se dice mucho acerca de los humanos, que somos únicos, que
no somos comprendidos fácilmente porque cada uno tiene algo que lo hace propio,
tener emociones no solo es algo característico de nosotros si no la
misericordia en nuestros corazones nos hace diferentes a los animales u otros
seres, cada ser humano es único y especial por lo que no se puede encontrar a
nadie igual a ti…
Pero y si esto fuera mentira?
*Hospital del Triara , Málico , Furen ,2023
Hace unos meses se reportó un accidente automovilístico a
las afueras de una carretera en Málico , nadie sabe con exactitud qué fue lo
que paso, ni quienes estuvieron implicados , ni cómo fue que una joven de 16
años apareció tirada en medio de la autopista rodeada de dos autos que suponen
colisionaron contra el pavimento . Ha estado en coma desde que llego, sus
signos vitales a pesar de encontrarse bajos a la hora del rescate , han
asombrado no solo a médicos si no a pacientes pues rápidamente se sostuvo su
regeneración, no solo de externa si no internamente. Lamentablemente la joven
que mostraba una increíble recuperación solo ha fallado en una cosa, su no despertar ha lamentado a muchos, puesto que
para ser joven, su salud que iba menguando mejoro asombrosamente, pero no daba
muestras de siquiera abrir los ojos …hasta hoy.
…………………………………..
Abrí los ojos, los sentía algo pesados, lo primero que pude
ver… o sentir fue una increíble y dolorosa sensación de malestar en mi cabeza
al vislumbrar los rayos del sol entrando por una de las ventanas del edificio.
¿Dónde estoy? – me pregunté a mi misma, confusa al no saber dónde me
encontraba, acaso estaba perdida… vi hacia mis lados y pude darme cuenta por
los aparatos quirúrgicos y desinfectantes –además del constante pitido de una
máquina que monitoreaba mis latidos- que me encontraba en un hospital, un
accidente….recuerdo algo, los sonidos de los autos, disparos, no recuerdo más…
¡Doctor! – gritó una uniformada, una enfermera que ingresaba
al recinto, pero no puso ni un pie dentro de mi habitación cuando salió disparada
hacia afuera llamando al doctor. A lo cual este rápidamente ingreso y empezó a
hacer lo que típicamente hacen los doctores, revisión. Empezaron a bombardearme
de preguntas cuando un dúo policial ingreso.
Buenos días señorita- comentó un hombre amable de no más de
40 años al parecer, moreno y alto, de ojos negros y cabello corto. A su lado un
joven de no más de 25 años serio con un
bolígrafo en mano y una libreta, tenía ojos azules y cabello oscuro, igual de alto
pero algo más reservado que su compañero.
….- solo dedique a mirarlo.
No ha comentado nada desde que ha despertado hace unos 20
minutos – comento la enfermera algo cabreada ¿tanto tiempo había pasado de
revisión en revisión?- A lo mejor sea muda –comento y eso me molesto.
Buenos…días- Dije sorprendiendo a toda la instancia, menos
al joven policía, que solo opto por levantar su mirada, y volverla a su libreta
para apuntar detalles ¿que acaso era su experimento de ciencias o qué?
Señorita se preguntará que hacemos aquí verdad? –Genio- Mi
nombre es Rodrigo Fernández, oficial de la policía nacional y si se pregunta
qué hacemos aquí es que hace unos meses ocurrió un accidente en la carretera a
las afueras de Málico y…
¿Qué tengo que ver yo en eso? –pregunté algo curiosa, no
recordaba absolutamente nada.
Usted… señorita…- Me quedo observando y después al doctor a
lo que este comentó:
No tenemos ningún informe de ella, ustedes la trajeron aquí
y pensamos que iban a darnos información de algún tipo, pero no sabemos más que
su edad por los análisis de sangre,
tampoco sale en el sistema, posiblemente no sea de aquí, en investigación
celular tampoco ha salido ninguna anomalía, al parecer está limpia.
¿Disculpe puede decirme su nombre? – preguntó el doctor a lo
que yo solo me espanté.